Su guía para administrar sus finanzas
Administrar cuidadosamente sus finanzas es importante para todos. Sin embargo, para las personas que viven con lupus, los altos costos de la atención de salud y el impacto que el lupus puede tener sobre la capacidad de una persona para trabajar puede ser una fuente adicional de estrés financiero y dificultar la elaboración de un presupuesto.
Si tiene lupus o ayuda a administrar las finanzas de un ser querido con lupus, hay pasos que puede seguir para establecer un presupuesto, planificar gastos inesperados y encontrar orientación que le ayude a administrar las finanzas más fácilmente.
Recopilación y revisión de la información
El primer paso para una gestión financiera saludable es obtener una visión completa de sus activos (cosas que tiene de valor), deudas (dinero que debe), facturas y gastos, y otros detalles financieros clave. Mirar toda su información financiera puede ayudarle a identificar si hay problemas urgentes que deben abordarse.
Reúna información sobre:
- Los activos, incluida las propiedades físicas que posee directamente (como una casa, un terreno o un vehículo), o las inversiones (como acciones, bonos o fondos mutuos)
- Las facturas, como facturas de los servicios públicos, seguro de automóvil o servicios de entretenimiento
- Los extractos de cuentas bancarias
- Los extractos de tarjetas de crédito
- Las deudas, incluidas hipotecas, préstamos para automóviles, préstamos estudiantiles, comerciales o personales
- La información fiscal
Si ayuda a un ser querido con sus finanzas, pídale que le ayude a reunir la información. Luego, programe un momento en el que puedan repasar todo juntos.
Creación de un presupuesto
Establecer y ceñirse a un presupuesto puede ayudarle a usted o a su ser querido a evitar gastar de más, pagar deudas, planificar emergencias y evitar sorpresas financieras.
Hay muchas formas diferentes de establecer un presupuesto, pero en cualquier presupuesto es importante establecer metas claras y realistas para gastar y ahorrar.
Un plan de presupuesto que usan algunas personas es el plan “50/30/20”. Significa gastar hasta el 50 por ciento de sus ingresos en cosas que necesita, como vivienda o alimentos, el 30 por ciento en cosas que quiere, como salir a comer o entradas para eventos, y el 20 por ciento en ahorros y pago de deudas, como para un fondo de emergencia o para pagar facturas médicas. Puede usar una calculadora en línea gratuita (en inglés) para ayudarle a calcular cuánto es el 50, 30 y 20 por ciento de sus ingresos.
El plan 50/30/20 puede ser un buen lugar para comenzar con un presupuesto, pero es posible que no sea adecuado para todas las personas o todas las situaciones. Por ejemplo, si vive en un área con un costo de vida más alto que el promedio, o si tiene deudas médicas, es posible que necesite reservar una mayor parte de su presupuesto para esos gastos y reducir sus gastos en otras áreas.
Hay muchos métodos y herramientas para ayudarle a planificar un presupuesto para usted o su ser querido, entre ellos:
- Escribir un presupuesto con lápiz y papel
- Hacer una hoja de cálculo detallada del presupuesto en una computadora
- Usar una aplicación gratuita, como GoodBudget (en inglés) o PocketGuard (en inglés)
Planificación para emergencias financieras
Crear un fondo de emergencia es un paso importante para sentirse financieramente seguro. Es especialmente clave para las personas con lupus, ya que es posible que una emergencia médica pueda causar una dificultad financiera repentina e inesperada. Un fondo de emergencia también puede ayudar si pierde su trabajo o tiene que pagar una reparación inesperada del automóvil o de la casa. También puede ayudarle a evitar el uso de otros métodos para cubrir esos costos, como usar tarjetas de crédito u obtener un préstamo a corto plazo.
La mayoría de los expertos financieros recomiendan ahorrar lo suficiente como para cubrir los gastos básicos de vida durante tres meses o más. Los gastos básicos de vida incluyen dinero para:
- Pagos de alquiler o hipoteca
- Comestibles
- Servicios
- Primas de seguros
- Costos de transporte, como un pase de autobús, pago de automóvil o gasolina
Para muchas personas, tener gastos médicos puede dificultar el ahorro. Además, ahorrar tres meses de gastos es todo un reto, especialmente si vive en una zona costosa, está tratando de pagar deudas o es financieramente responsable de niños u otros miembros de la familia. Si ahorrar tres meses de gastos le parece abrumador, sepa que no está solo. Si puede, comience ahorrando una cantidad menor (lo que pueda) y luego vaya aumentando su fondo poco a poco.
Si usted o su ser querido se encuentra en una emergencia financiera, es importante:
- Evaluar el costo de la emergencia. Por ejemplo, considere si la emergencia es un gasto único, como una factura médica, o continuo, como perder el trabajo. ¿Tiene un fondo de emergencia? ¿Tiene activos que podrían venderse, si fuera necesario?
- Revisar y priorizar los gastos. Determinar la cantidad necesaria para cubrir los gastos básicos y ver si es posible recortar los gastos no esenciales.
- Retirar dinero de un fondo de emergencia, si está disponible. Si usted o su ser querido tiene dinero reservado, úselo para cubrir gastos básicos.
- Usar un seguro de discapacidad a corto o largo plazo. Dependiendo del tipo de emergencia financiera y de si usted o su ser querido están asegurados, es posible que pueda recibir beneficios por discapacidad a corto o largo plazo.
- Hablar con los prestamistas. Es posible que pueda negociar un plan de pago con los prestamistas durante una dificultad financiera.
- Buscar recursos y servicios comunitarios. En la mayoría de los estados, puede marcar 211 para referencias a servicios financieros y comunitarios.
Obtener ayuda con la planificación financiera
Administrar el dinero puede ser abrumador. Sin embargo, debe saber que hay recursos que pueden ayudarle y medidas que puede tomar para conseguir apoyo.
Si no está seguro de por dónde empezar, puede considerar buscar ayuda de un planificador financiero. Puede usar estos recursos para encontrar un planificador financiero certificado:
- Asociación de Planificación Financiera (en inglés)
- La Asociación Nacional de Asesores Financieros Personales (NAPFA, por sus siglas en inglés) (en inglés)
Los planificadores financieros también pueden ayudar si usted está en la posición de administrar el dinero de un ser querido. Las finanzas pueden ser un tema muy delicado para muchas personas, y su ser querido puede sentirse más cómodo hablando con un profesional que con usted. Así que trate de no tomárselo como algo personal si su ser querido duda en dejarle ayudarlo.

