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Lo que debe saber sobre las adaptaciones en el lugar de trabajo
La experiencia del lupus es diferente para cada persona. Algunas personas descubren que los síntomas del lupus pueden dificultar hacer partes de su trabajo. Esto puede ser cierto para las personas que hacen mucha actividad física en el trabajo o para las personas que trabajan en un escritorio la mayor parte del tiempo.
Si le han diagnosticado lupus y desea seguir trabajando, usted tiene derecho a solicitarle a su empleador adaptaciones razonables, como ajustes en sus tareas laborales, equipos especiales o cambios en su entorno u horario de trabajo, que pueden ayudarle a seguir haciendo su trabajo.
Adaptaciones en el lugar de trabajo
La Ley para personas con discapacidades (ADA, por sus siglas en inglés) es una ley que protege a las personas que tienen ciertas afecciones de salud física o mental de la discriminación. Según la ley, si el lupus afecta su capacidad para trabajar, usted tiene derecho a adaptaciones razonables que puedan ayudarle a hacer su trabajo.
¿Qué adaptaciones puedo solicitar?
Es posible que desee solicitarle a su empleador diferentes tipos de adaptaciones, dependiendo de cómo sus síntomas de lupus afecten su trabajo. Por ejemplo:
- Si la fatiga es un síntoma común para usted, podría solicitar una horario flexible para que pueda trabajar en los momentos en que tenga más energía.
- Si las articulaciones hinchadas en las manos y los dedos dificultan o hacen doloroso el uso de un teclado normal, puede solicitar un teclado ergonómico, un reposamuñecaso ayudas para escribir (en inglés) o usar el teclado.
- Si es sensible a temperaturas frías y calientes, podría solicitar ropa para frío o calor, un calentador de ambiente o un acondicionador de aire portátil.
- Si es sensible a la luz, puede solicitar cubiertas de luz para minimizar la exposición a los rayos UV de las bombillas fluorescentes.
Puede ser difícil saber por dónde empezar con las adaptaciones, pero hay recursos que pueden ayudar. La página de la Red de Adaptación Laboral (JAN, por sus siglas en inglés) para Personas tiene más ideas sobre los tipos de adaptaciones a considerar, orientación sobre cómo enviar solicitudes de adaptaciones a su empleador y más.
¿Cómo puedo solicitar adaptaciones a mi empleador?
Para algunas personas, solicitar adaptaciones puede ser una parte especialmente difícil de adaptarse a un diagnóstico de lupus. Puede sentirse vulnerable compartiendo información personal con su empleador. Además, hablar con alguien sobre las formas en que su cuerpo ha cambiado (o el apoyo que necesita ahora y que antes no necesitaba) puede no ser fácil. Sin embargo, un empleador comprensivo querrá saber lo que usted necesita y cómo puede ayudarle.
Puede seguir estos pasos para decidir qué adaptaciones son adecuadas para usted y hacer su solicitud:
- Lleve una copia de la descripción de su trabajo a su proveedor de atención de salud. Su proveedor puede ayudarle a determinar qué adaptaciones serían más útiles de acuerdo con sus síntomas de lupus y sus tareas laborales.
- Obtenga una carta de su proveedor de atención de salud. Pídale a su proveedor que escriba una carta a su empleador solicitando las adaptaciones que usted necesita.
- Piense en cómo hará su solicitud. Dependiendo de cómo funcione su empresa o la estructura de su trabajo, podría empezar por hablar con su supervisor directo. O tal vez desee concertar una cita para hablar con alguien del departamento de recursos humanos de su empresa.
- Decida si hará su solicitud verbalmente o por escrito. Según la Comisión para la Igualdad de Oportunidades (EEOC, por sus siglas en inglés), las solicitudes de adaptaciones no tienen que presentarse por escrito. Sin embargo, es una buena idea documentar su solicitud, en caso de que haya un desacuerdo sobre cómo (o si) sucedió después de los hechos.
¿Qué pasa si mi empleador rechaza mi solicitud de adaptaciones?
Una empresa puede rechazar una solicitud de adaptación si considera que le causará “dificultades excesivas”, es decir, que sería demasiado costosa o difícil. También podría ofrecer una acomodación alternativa que consideren igualmente eficaz.
Si cree que su solicitud ha sido rechazada injustamente, siga el proceso de su empresa para resolver desacuerdos o disputas. Si eso no resuelve el problema, puede presentar una queja ante la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo (EEOC, por sus siglas en inglés), la agencia federal encargada de hacer cumplir las leyes contra la discriminación en el lugar de trabajo.
Piense en la seguridad laboral
Es comprensible que le preocupe que solicitar adaptaciones pueda poner en riesgo su trabajo. La seguridad laboral es una prioridad para muchas personas, pero especialmente para aquellas que tienen afecciones de salud crónicas y seguro médico proporcionado por un empleador. Sin embargo, su empresa no puede despedirlo legalmente por tener una afección médica o por solicitar adaptaciones. Además, si usted tiene antecedentes de éxito en su trabajo, su empleador tiene buenas razones para conservarlo, especialmente si ha trabajado allí durante varios años y conoce bien la empresa.
¿Qué pasa si ya no estoy seguro de poder hacer este trabajo?
Las adaptaciones no son la única opción. Puede ser difícil pensarlo ahora, pero si los síntomas del lupus le han dificultado mucho hacer su trabajo, incluso con las adaptaciones implementadas, es posible que no sea saludable para usted continuar en ese puesto. Además, si trabaja en un empleo físicamente exigente, como construcción o al aire libre, es posible que no haya adaptaciones razonables que le permitan continuar en esa función de manera segura. El exceso de estrés puede hacer que su síntomas del lupus empeoren. Está bien seguir adelante. Dejar su trabajo no es un fracaso y no demuestra falta de esfuerzo o compromiso de su parte.
Otra opción a considerar es ausentarse del trabajo durante un brote o una emergencia médica. La Ley de Licencia Médica y Familiar (FMLA, por sus siglas en inglés) es una ley que permite a los empleados elegibles tomar hasta 12 semanas de licencia no remunerada de su trabajo por determinadas razones médicas y familiares. Si se ausenta del trabajo bajo la FMLA, su trabajo estará protegido y usted mantendrá la cobertura de seguro de salud de su empresa mientras esté de licencia. Tenga en cuenta que si toma FMLA, su salario puede verse afectado durante esa ausencia.
Si decido buscar un nuevo trabajo, ¿hay algo que debo tener en cuenta?
La búsqueda de empleo puede parecer diferente a como era antes, porque sus prioridades pueden haber cambiado desde su diagnóstico de lupus. Por ejemplo, algunas personas con lupus pueden optar por buscar un trabajo que les permita trabajar desde casa o tener un horario flexible. Sin embargo, es importante recordar que tener lupus no lo convierte en un candidato menos competitivo o menos calificado.
No es necesario que le diga a un posible empleador su diagnóstico cuando lo estén considerando para un puesto, pero puede hacerlo. Algunas personas eligen revelar, o compartir su diagnóstico, para que puedan debatir las adaptaciones con un posible empleador y asegurarse de que el trabajo será adecuado para sus necesidades. Si le dice a un empleador potencial que tiene lupus, es ilegal que lo discriminen o decidan no contratarlo debido a su diagnóstico de lupus.
Dicho esto, algunas veces, los empleadores discriminan a personas con discapacidades y problemas de salud sin darse cuenta de que lo que hacen es ilegal. Por ejemplo, un empleador podría asumir que usted será menos productivo o que necesitará ausentarse más porque tiene lupus y decidir no contratarlo debido a esas suposiciones. Lamentablemente, este tipo de discriminación puede ocurrir, por lo que es importante comprender sus opciones. Para obtener más información sobre cómo revelar su diagnóstico a un posible empleador, visite la página de divulgación de discapacidad de JAN.
Qué pasa si creo que ya no puedo trabajar?
Si sus síntomas de lupus le dificultan demasiado trabajar, es posible que pueda recibir beneficios del Seguro por Incapacidad del Seguro Social (SSDI, por sus siglas en inglés). Si tiene un historial laboral y ya no puede trabajar debido a una discapacidad, el SSDI le proporcionará pagos mensuales para ayudarle a cubrir los costos de vida. Después de 24 meses, las personas que reciben el SSDI se vuelven automáticamente elegibles para Medicare.